martes, 10 de abril de 2018

El loco que era más cuerdo

Piso mi situación, entre otros labios;
los besos dados al olvido, las canciones oxidadas el en trastero:
resucito ideas, recoloco papeles manchados y ya rotos;
Camino un nuevo camino por las sendas del tiempo;
y estoy bien, me siento bien, medito bien....
como un suspiro, como la nostalgia que habita el ultimo sorbo en el bar;

Resumo las ilusiones en las manos que crepitan y se erizan;
en las noches haciendo el amor teniendo por cielo unos labios;
carmín desdibujado por las horas bebiendo cafés hacia ninguna parte;
y leo libros de autoayuda que no tienen auto,
llueve, llueve en las mejillas de la anciana que dicen que está loca;
en la suela de los zapatos que chapotean y se manchan de barro;
en alianzas de boda multicolor, y miradas que  se esconden;
mentiras a medias, y medias que se bajan lentamente;
cumplo mis expectativas en reuniones que no llegan a ninguna parte;
en mensajes que un día escribí y hoy tres meses mas tarde no se han leído...

Despido la nostalgia, Igual me llaman loco;
loco es el que hace locuras, y en la cordura esta la locura,
consecuente en las fichas a mover, en los trazos destilados,
leí periódicos de anteayer, me emborrache en cuerpos equivocados,
caí una y mil veces, y mil una veces me levanté;
busqué las manos invisibles para componer un romance,
en los momentos lúcidos que los cafés son mi único consuelo;
mirando al fuego del destierro, noticiarios sin sabor,
te quiero escritos a la contraluz del tiempo;

Suenan las campanas y llueve,, quizás es otro final....





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